lunes, 22 de junio de 2015
Resulta particularmente interesante la mirada sustentable de la gestión empresaria que atiende, además del aspecto económico, lo social y lo ambiental. En tal sentido, y para profundizar lo que charlamos en el aula, les recomiendo la lectura de la Encíclica Papal
http://w2.vatican.va/content/dam/francesco/pdf/encyclicals/documents/papa-francesco_20150524_enciclica-laudato-si_sp.pdf
de reciente aparición y que está dando que hablar en todo el Planeta.
http://w2.vatican.va/content/dam/francesco/pdf/encyclicals/documents/papa-francesco_20150524_enciclica-laudato-si_sp.pdf
de reciente aparición y que está dando que hablar en todo el Planeta.
viernes, 19 de junio de 2015
Investigar y preparar presentación (15 min) acerca de las características, modelos, tipos, accionamiento, instalación y/o aplicaciones de los siguientes equipos de movimiento de materiales:
4º 3ª
Maure - Savarese - Baez: CINTA TRANSPORTADORA
Noceti - Prior - Romero - Heianna: AUTOELEVADOR
Losavio - Medina - Noriega - Giménez: PUENTE GRUA
4º 4ª
Cereigido - López - Macavilca: CINTA TRANSPORTADORA
Sábato - Erausquin: MONTACARGAS
Sun - Campos - Giacomassi: TRANSPORTADOR SIN FIN
Bahamondes - Díaz - Alvarez: AUTOELEVADOR
5º 1ª
Grance - Micolucci - Roca: CARRETILLA HIDRAULICA
Negrini - Fares - Cabrini: AUTOELEVADOR
Romero - Ontiveros - Shiroma; CINTA TRANSPORTADORA
Marot - Bataller: MONTACARGAS
5º 2ª
Medina - Ahumada: AUTOELEVADOR
Lanzieri - Cirilo: CARRETILLA HIDRAULICA
Inca - Rubinztain - Alvarez: MONTACARGAS
Aguirre - Florentin - Pecci: CINTA TRANSPORTADORA
5º 3ª
Rasulo - Sánchez - Santoni: PUENTE GRUA
Saullo - Solís - Torrez: AUTOELEVADOR
Gusmerotti - Leiss - Ore: MONTACARGAS
Bandeo - Buontempo - Guccione: CINTA TRANSPORTADORA
jueves, 11 de junio de 2015
Leer para la próxima:
DISTRIBUCION
EN PLANTA - Layout
Definición:
La distribución de planta es un concepto relacionado con la disposición de las máquinas, los departamentos, las estaciones de trabajo, las áreas de almacenamiento, los pasillos y los espacios comunes dentro de una instalación productiva propuesta o ya existente . La finalidad fundamental de la distribución en planta consiste en organizar estos elementos de manera que se asegure la fluidez del flujo de trabajo, materiales, personas e información a través del sistema productivo.
Características de una adecuada Distribución de Planta:
La distribución de planta es un concepto relacionado con la disposición de las máquinas, los departamentos, las estaciones de trabajo, las áreas de almacenamiento, los pasillos y los espacios comunes dentro de una instalación productiva propuesta o ya existente . La finalidad fundamental de la distribución en planta consiste en organizar estos elementos de manera que se asegure la fluidez del flujo de trabajo, materiales, personas e información a través del sistema productivo.
Características de una adecuada Distribución de Planta:
· Minimizar los costos de
manipulación de materiales.
· Utilizar el espacio
eficientemente.
· Utilizar la mano de obra
eficientemente.
· Eliminar los cuellos de
botella.
· Facilitar la
comunicación y la interacción entre los propios trabajadores, con los
supervisores y con los clientes.
· Reducir la duración del
ciclo de fabricación o del tiempo de servicio al cliente.
· Eliminar los movimientos
inútiles o redundantes.
· Facilitar la entrada,
salida y ubicación de los materiales, productos o personas.
· Incorporar medidas de
seguridad.
· Promover las actividades
de mantenimiento necesarias.
· Proporcionar un control
visual de las operaciones o actividades.
· Proporcionar la
flexibilidad necesaria para adaptarse a las condiciones cambiantes.
Ideas para la elección de una adecuada Distribución de Planta:
El tipo de distribución elegida vendrá determinado por:
· La elección del proceso.
· La cantidad y variedad
de bienes o servicios a elaborar.
· El grado de interacción
con el consumidor.
· La cantidad y tipo de
maquinaria.
· El nivel de
automatización.
· El papel de los
trabajadores.
· La disponibilidad de
espacio.
· La estabilidad del sistema
y los objetivos que éste persigue.
Las decisiones de distribución en planta pueden afectar significativamente la eficiencia con que los operarios desempeñan sus tareas, la velocidad a la que se pueden elaborar los productos, la dificultad de automatizar el sistema, y la capacidad de respuesta del sistema productivo ante los cambios en el diseño de los productos, en la gama de productos elaborada o en el volumen de la demanda.
Tipos Básicos de Distribución en Planta:
Existen cuatro tipos básicos de distribuciones en planta:
jueves, 4 de junio de 2015
viernes, 29 de mayo de 2015
Investigar:
a) ¿En qué zona del planeta se concentran las grandes fábricas de zapatillas de las marcas conocidas?
b) ¿Qué son las "maquilas"?
c) ¿Qué país ha crecido enormemente durante los últimos años en el desarrollo de software?
d) ¿Dónde se produce aluminio en nuestro país?
e) ¿Qué requerimientos tiene la producción de pulpa para papel?
f) ¿Qué significa "denominación de origen"? Buscar 3 ejemplos
g) En qué provincia se concentra la industria electrónica?
h) ¿Por qué las bodegas están radicadas en la zona cuyana?
a) ¿En qué zona del planeta se concentran las grandes fábricas de zapatillas de las marcas conocidas?
b) ¿Qué son las "maquilas"?
c) ¿Qué país ha crecido enormemente durante los últimos años en el desarrollo de software?
d) ¿Dónde se produce aluminio en nuestro país?
e) ¿Qué requerimientos tiene la producción de pulpa para papel?
f) ¿Qué significa "denominación de origen"? Buscar 3 ejemplos
g) En qué provincia se concentra la industria electrónica?
h) ¿Por qué las bodegas están radicadas en la zona cuyana?
jueves, 21 de mayo de 2015
La próxima vamos a resolver el siguiente ejercicio en clase:
La Empresa A&B produce
y comercializa alrededor de 150 partes y conjuntos de grifería, a partir de 14
materias primas. Abarca el 20% del
mercado en sus productos habituales y ha decidido lanzar una nueva línea
económica en la cual debe competir con otras empresas ya acreditadas. Cuenta con un plantel de 65 personas en los
sectores de Fundición, Estampado, Mecanizado y Terminación. En la actualidad, los mayores problemas
provienen del sector Mecanizado, en donde se tienen 4 tornos automáticos, de
los cuales sólo se utilizan 2 simultáneamente (los restantes presentan falta de
mantenimiento o simplemente no tienen tarea asignada). Además, generalmente
sólo producen un 80% del standard. Un
reciente estudio detectó estos valores, para dos de las piezas que se producen:
INSUMOS
ESPECIFICOS UNITARIOS (SECTOR MECANIZADO)
|
pieza 100
|
pieza 120
|
COSTO
|
bronce
|
1
u / 200 g
|
1
u / 50 g
|
200
$ / kg
|
aluminio
|
1
u / 500 g
|
-.-
|
100
$ / kg
|
PVC
|
1
u / kg
|
1
u / 500 g
|
50
$ / kg
|
Mano de Obra
|
20
u / HH
|
100
u / HH
|
100
$ /HH
|
Tornería
|
50
u / HM
|
100
u / HM
|
50 $ /HM
|
Fuerza Motriz
|
1000
u / Kw
|
2000
u / Kw
|
5
$/Kw
|
Precio
de venta
|
$600
|
$
250
|
|
Los operarios
del sector dicen que se esfuerzan más que los de los otros sectores, y sin
embargo en Fundición, Estampado y en Terminación los costos promedio de la Mano de Obra directa son de
$110; $130 y de $120, respectivamente.
En el sector trabaja un tornero en cada máquina herramienta, además de
dos aprendices, en turnos mañana y tarde.
La Empresa
siempre busca capacitar a su personal para luego promoverlo.
·
A partir de la información disponible, detectar
problemas de eficacia y eficiencia en el sector de Mecanizado.
·
Definir equivalencia entre las piezas 100 y 120,
en base al insumo PVC.
·
Calcular la productividad específica del bronce.
·
Calcular la productividad parcial de la pieza
100.
jueves, 7 de mayo de 2015
Material de lectura para la próxima clase.
Adaptación de "Dirección Estratégica de la Producción",
Ed. Nueva Librería. Simonassi y Leiter
1.1. Sistemas.
Ante un universo de cosas o fenómenos, es posible
aislar conjuntos complejos de componentes relacionados o dependientes entre sí,
que sirven a propósitos o finalidades comunes.
Se llaman sistemas a las entidades
físicas o virtuales constituidas por conjuntos de componentes
interrelacionados, enlazados entre sí funcionalmente mediante reglas, para
contribuir a ciertos propósitos. Un
sistema incluido en otro se define como subsistema, sistema interior o sistema
de nivel de inclusión inferior respecto de aquél. Y viceversa, un sistema que incluye a otro se
define como metasistema, entorno o contexto, sistema exterior o sistema de
nivel de inclusión superior respecto de aquél.
Por ejemplo, el Sistema Solar está incluido en la Vía Láctea
(metasistema) y, a su vez, incluye al planeta Júpiter (subsistema). La elección del nivel de referencia es
arbitraria. Si se imagina cualquier
sistema como una cebolla, es posible observar cada capa tanto a nivel macro
como en detalle, y al nivel próximo y/o al más distante de cada interfaz o
frontera entre capas.
Se denomina pensamiento sistémico al que busca
entender cualquier cosa o fenómeno como un sistema. Fenómeno alude a manifestación de algo, a lo
que aparece y se deja observar. En la
práctica, se trata de pensar en la totalidad de los componentes del sistema en
consideración y en las interacciones entre ellos, y encontrar los grados de
libertad disponibles para jugar con todo lo que se pueda. De poco vale que un
componente funcione óptimamente si los demás componentes del sistema no lo
hacen de similar manera. Aunque pueda
ser necesario analizar la contribución de cada componente, normalmente importa
la optimización de todo el sistema (no de manera parcial, considerando sólo
alguno de sus componentes).
En general, los sistemas poseen una estructura donde se manifiesta el orden
de los subsistemas componentes y se identifican las respectivas
jerarquías. De allí, es posible definir
los sistemas por niveles de propósitos, y comúnmente se dice que un sistema es
de nivel inferior a aquél que le fija los requerimientos. Tal como los movimientos de Júpiter están
condicionados por los del Sistema Solar, y los de éste, a su vez, por los de la
Vía Láctea. Además, es posible desplegar
cualquier propósito de un sistema de nivel superior en los propósitos de los
subsistemas de nivel inferior componentes del primero.
Los sistemas pueden
ser cerrados o abiertos, respecto del intercambio de energía con el medio
externo que los rodea. Los sistemas cerrados son sólo
abstracciones ideales, de utilidad para el estudio teórico, por ejemplo, de
fenómenos físico químicos. Todos los
sistemas reales son sistemas abiertos;
es decir, interactúan con el medio externo que los rodea, en mayor o menor
grado (concepto proveniente de la biología, sumamente útil para describir las
interacciones de organismos vivos con su entorno). Mientras que en los primeros sólo hay
componentes
propios, denominados variables internas,
en los últimos además existen otros componentes integrando el entorno, o variables externas. Cuando un sistema puede
interactuar de alguna manera con el medio externo, dichas variables externas
afectan necesariamente su desempeño, aunque no sea posible dominarlas (modificarlas a voluntad)
o controlarlas.
Además de las variables, en los sistemas se reconocen condicionantes o
circunstancias que se mantienen constantes al menos en el corto plazo,
denominados parámetros. Tanto el conocimiento de las variables como
el de los parámetros permiten comprender la naturaleza del sistema bajo
análisis.
Se denominan sistemas naturales
a aquellos derivados de la Naturaleza (por ejemplo, el planeta Tierra,
conformado por minerales, vegetales y animales). En cambio, se denominan sistemas artificiales a aquellos construidos por los seres humanos,
siempre y cuando éstos últimos no sean parte de su funcionamiento, aunque
puedan ser sus iniciadores (por ejemplo, un reloj, una “play station” o un
ventilador).
Una combinación de
los anteriores conocida como ecosistemas naturales abiertos, existe como
tejidos o redes de componentes interrelacionados, en constante movimiento, con
ciclos y autorregulación mediante retroalimentación (por ejemplo, un bosque, un
hormiguero). Esa retroalimentación
crea aprendizaje. El buen
funcionamiento depende de la cooperación y la asociación entre sus componentes. Para sobrevivir deben responder a los cambios
del entorno. Cuanta más diversidad y
flexibilidad hay dentro de dichos sistemas, más posibilidades tienen de
sobrevivir a cambios externos importantes del medio ambiente. Particularmente, se llaman sistemas sociales a
aquellos ecosistemas naturales abiertos en los cuales los seres humanos son sus
componentes (un pueblo, una familia, un grupo de amigos). De hecho, todos
los sistemas sociales son abiertos, y se pueden concebir relacionados dinámica
e integralmente con sus respectivos entornos, pudiendo cada uno recibir varias
entradas [inputs] y convertirlas de manera diversa, dando como resultado
ciertas salidas [outputs].
La necesidad de
contemplar tanto los aspectos sociales como técnicos involucrados en industrias y, también, en bancos, hospitales,
restaurantes, etc., ha caracterizado lo que se conoce como sistemas sociotécnicos. El británico Peter Vaill, ha definido: "Sistema sociotécnico es cualquier ente
en que las personas combinan coordinadamente su trabajo, cooperativamente,
utilizando máquinas y equipamiento, para alcanzar cierto propósito." Cualquiera de las anteriores actividades se
ajusta a dicha definición. Todas ellas
pueden ser estudiadas sistémicamente, con el fin de comprenderlas y perfeccionarlas. Todas requieren de acciones cooperativas,
tienen su propia tecnología y sus propios propósitos.
Distintos Sistemas.
|
||||||
Para los siguientes sistemas, se presentan algunos
descriptores relacionados, y un par de ejemplos de cada uno. Tratándose de una lista no exhaustiva, el
lector podrá agregar otros. Dichos
ejemplos se han relacionado con algún sistema en particular, aunque podrían
incluirse en otros.
|
||||||
Sistema
|
Subsistemas
|
Variables
internas
|
Variables
externas
|
Parámetros
|
Entradas
|
Salidas
|
|
|
|
|
|
|
|
Estación de
servicio en ruta
|
lavado;
mini mercado
|
existencia de
combustible; cantidad de “playeros”
|
flujo vehicular;
regulaciones de
seguridad
|
ubicación
geográfica; capacidad de tanques
|
vehículos a
atender;
combustible
|
vehículos
atendidos;
monto de las
ventas
|
Imprenta comercial
|
fotocopiado;
diseño gráfico
|
stock de papel;
horario de atención
|
nuevas
tecnologías; demanda
|
tecnología
utilizada; capacidad instalada
|
tintas;
fuerza motriz
|
ploteados; pago de
impuestos
|
Gomería
|
alineación y
balanceo;
reparación de
cubiertas
|
competencia del
personal; stock de cubiertas
|
estado de las
calles; vehículos que acceden
|
dimensiones del
taller; cantidad de personal
|
cubiertas nuevas;
herramientas
|
cubiertas
reparadas; capacitación al personal
|
Club social y deportivo
|
gimnasio;
natatorio
|
cuota social;
programa de actividades
|
actividades
alternativas; regulaciones de seguridad
|
instalaciones; estructura jerárquica
|
instructores;
socios
|
vinculación
comunitaria;
socios con
destreza
|
Super
mercado
|
verdulería; congelados
|
marcas;
promociones
|
poder adquisitivo;
normativas de higiene
|
precios máximos;
cámara frigorífica
|
mercadería; bolsas
para clientes
|
envíos a
domicilio; residuos
|
Sala de Cine
|
boletería;
proyección y sonido
|
programas; temperatura de la sala
|
otros espectáculos;
provisión de energía
|
cantidad de
butacas; zona de influencia
|
films;
insumos para
limpieza
|
espectadores; ganancias
|
Línea de
transporte subterráneo
|
expendio de
boletos; vagones
|
frecuencia;
cantidad de vagones por formación
|
regulaciones de
precios; transportes alternativos
|
recorrido de vías; cantidad total de vagones
|
energía eléctrica;
pasajeros
|
pagos al personal;
pasajeros trasladados
|
Panadería
artesanal
|
amasado y
horneado; pastelería
|
línea de
productos; calidad
|
normativas
alimentarias; panificación industrial
|
volumen del horno;
cantidad de amasadoras
|
harina;
personal
capacitado
|
panes;
pago a proveedores
|
1.1.1.
Sistemas Empresariales.
Las empresas son como
seres vivos: nacen, crecen, se desarrollan, envejecen y mueren. Algunas tienen un ciclo de vida de cientos de
años; otras -las más- apenas superan unos pocos meses. La clave de la supervivencia reside en la
adaptación al medio. En la medida en que
el sistema empresa se integre en forma armónica con su entorno, y perciba
claramente qué requiere cada uno de sus componentes, será sostenible. Existen elementos comunes entre un micro
emprendimiento y una gran corporación internacional, así como los hay entre la
más primitiva de las criaturas y la más evolucionada.
Todas las empresas son sistemas sociotécnicos abiertos, denominados sistemas empresariales. Cada empresa es una entidad social que surge,
existe y se sostiene en el tiempo siempre que tenga sentido para el metasistema
sociedad que la contiene. Las partes sociales interesadas en la
existencia de la empresa [stakeholders], habitualmente
se clasifican en: A) clientes, usuarios y/o consumidores;
B) propietarios, incluyendo accionistas detentores
del activo [shareholders]; C) colaboradores, incluyendo directivos,
operadores y representantes sindicales; y D) sociedad en general, incluyendo
proveedores y contratistas. A veces, en
las PyMES, los propietarios se desempeñan simultáneamente como colaboradores,
compatibilizando los intereses de ambos roles.
Los primeros velan por el rendimiento, la liquidez y la seguridad de su
inversión; mientras que los segundos (remunerados por la empresa) se preocupan por
el cumplimiento de los planes y la ejecución de las actividades.
Visto así,
los propósitos de los sistemas
empresariales, comunes para todas las empresas, son satisfacer -consistente
y simultáneamente- las expectativas y necesidades de dichas cuatro partes sociales
interesadas. El término propósito se
utiliza comúnmente para manifestar lo esencial; lo existente. La modalidad a través de la cual se concretan los propósitos se define
mediante políticas, objetivos y metas, para cada sistema empresarial.
Las
políticas [policies] enuncian rumbos o directrices generales a seguir entre
muchas posibilidades, acerca de los aspectos principales de la actividad,
usualmente con relación al largo plazo. Para
alcanzar su propósito, una empresa se podría plantear varias y diversas políticas
para satisfacer a las mencionadas partes interesadas. Por ejemplo, una política de calidad para
proveer bienes y servicios satisfactorios a los clientes; una política de crecimiento, con proyección sobre el futuro, que satisfaga a
los accionistas; una política de desarrollo del capital humano, tal que la
empresa pueda satisfacer las expectativas de sus colaboradores; una política de
responsabilidad social, para generar una imagen positiva sobre la sociedad; y
así siguiendo.
En general, cada política se puede conformar por una sumatoria de lineamientos. Por ejemplo, en el caso del desarrollo del
capital humano, podría incluir la continua formación de los colaboradores; la cobertura
de puestos vacantes con personal propio, antes que externo; el cuidado de la
seguridad y la salud ocupacional de las personas; la evaluación periódica del
desempeño y planes de carrera; etc. Las
políticas y sus lineamientos varían de acuerdo con el contexto cultural,
social, económico y tecnológico dentro del cual cada empresa opera. La cultura predominante (tradiciones,
costumbres, credos o creencias, paradigmas, utopías, etc.), o entorno dentro
del cual se desarrollan los directores de las empresas, tiene una gran
importancia, puesto que les condiciona su manera de ver la realidad,
interpretarla y actuar en consecuencia.
Los multimedios, Internet, etc., generan información y desviaciones de
esa información, impregnando a las personas de modelos de conducta, de
pensamiento y de sentimiento.
Para cumplir las políticas, se enuncian los objetivos [targets] que fijan rumbos específicos, también
entre muchas posibilidades, pero en el corto plazo. Así, es posible definir, por ejemplo, objetivos
de capacitación técnica y en gestión, alineados con la referida política de formación
continua de los colaboradores. A su vez,
para el cumplimiento de los objetivos, se cuantifican los resultados a
conseguir mediante metas [goals]; es
decir, se los traduce en resultados mensurables, tales como cantidad (volumen),
calidad (característica, propiedad), tiempo (velocidad, frecuencia, plazo) y/o
costo (dinero). Para los objetivos
anteriores, por ejemplo, programas de capacitación al personal que incluyan
temarios, desarrollo de contenidos, cargas horarias, facilitadores, calendarios,
etc.
Los sistemas empresariales son componentes integrantes de metasistemas
denominados entornos empresariales o mercados,
donde se realizan habitualmente transacciones comerciales: vendedores y
compradores intercambian mercancías o mercaderías por dinero. Los sistemas empresariales, albergados en los
mercados, tienen algunos nexos inmediatos con los mismos (mercados locales o
domésticos) y otros más distantes (mercados regionales o internacionales). En general, la interdependencia entre los
sistemas empresariales y sus entornos tiene consecuencias trascendentes para
los primeros, ya que se deben adaptar a los cambios de los segundos y, a la
vez, tratar de influirlos. Los mercados
siempre restringen o condicionan (por ejemplo, limitan la oferta de recursos,
acotan la demanda de mercaderías), e influyen de alguna manera sobre los
resultados de los sistemas empresariales.
El sistema empresarial se puede ver como un
mediador con su entorno, entre los mercados de demanda (adonde vende lo
producido) y el de oferta (adonde compra los recursos necesarios para
producir). Además, actúa en el mismo
entorno con otros sistemas similares, compitiendo por obtener proveedores y
clientes, de manera interrelacionada.
Dentro y fuera de cualquier sistema empresarial, como se vio existen partes
interesadas que propician su buena marcha.
A mayor armonía de intereses de dichas partes, tanto menor conflicto. No obstante, en contraposición, también
existen otras partes que quieren impedir (inhibir, paralizar) esa buena marcha. Es el caso de los competidores; las fuerzas
sociales con intereses opuestos y los sectores perjudicados por el accionar de
la empresa.
Desde
la concepción sistémica, la empresa puede verse como compuesta por distintos
subsistemas. En la Figura 1.a se muestra un modelo de sistema empresarial y su entorno, donde se identifican subsistemas funcionales: comercialización; administración
y finanzas; investigación y desarrollo; y un
núcleo central compuesto por operaciones y logística, que representa al
subsistema de producción. También
es posible ver la empresa compuesta por subsistemas
de gestión: dirección (políticas, objetivos
y metas); estructural (organización, jerarquías y roles); informativo
(información y comunicaciones); y táctico (decisión, ejecución y control). En ambos casos, todos ellos interactúan
y coexisten, permitiendo la realización de las actividades empresariales.
1.1.2. Sistemas de Producción.
Durante milenios, los seres humanos produjeron casi exclusivamente lo
indispensable para satisfacer sus necesidades básicas: alimentos, vestidos,
utensilios, etc. Lo producido era
entonces propiedad de quien trabajaba para conseguirlo, quien podía o no
compartirlo con su entorno inmediato.
Paulatinamente, los pueblos crecieron y comenzaron a identificar
funciones: quienes gobernaban, quienes cultivaban la tierra, quienes
construían, quienes enseñaban. Los
artesanos (por ejemplo, especializados en amasar el pan o forjar el hierro)
tuvieron la habilidad para intercambiar lo producido por su trabajo, en sus
comunidades. Los bienes y los servicios
producidos comenzaron a ser comercializados; primero por trueque, y mucho más
tarde con moneda. Siglos de
diferenciación de las tareas y evolución de aquellas necesidades primitivas
originaron una multiplicidad de bienes y servicios producidos por unos, y
usados o consumidos por otros. Hoy se
consumen más bienes y servicios que en cualquier época pasada. La diversidad de la oferta pretende
satisfacer necesidades y deseos crecientes de los usuarios, con requerimientos
cada vez mayores.
Así ya sea lo
producido un bien o un servicio, el efecto que proporciona al usuario da una
mejor idea de su finalidad que cualquier otra consideración (por ejemplo, un
reloj permite medir el tiempo, un lápiz permite dibujar trazos). Cada vez más, crece la importancia relativa de
muchos aspectos intangibles, reconocidos por los usuarios, tales como la
cortesía de atención, la confianza en la marca, o el prestigio de
posesión. Es decir,
la singularidad de lo producido se define por el servicio que le presta al
usuario. Las empresas productoras
producen productos, pero los clientes usan o consumen servicios. La finalidad o sentido de la producción no
está en lo que se produce, sino que se relaciona con las necesidades y los
deseos que buscan satisfacer los clientes.
Lo producido es sólo un medio para satisfacer sus necesidades y
deseos. Visto así, adquiere mucho
sentido pensar en adelante en la entidad producto+servicio. Por ejemplo, el producto jabón de tocador
sirve para la higiene corporal, una gaseosa para saciar la sed, una película de
ficción o una novela para entretenimiento del usuario.
En las empresas productoras, los respectivos sistemas de producción, al
igual que los de comercialización o administración y finanzas, forman parte de los
metasistemas empresariales, como se ha mostrado en la Figura 1.a. Dichos sistemas de producción son,
básicamente, de transformación y/o traslación de objetos, de los que salen
ciertos resultados denominados productos+servicios
o salidas al exterior [outputs]. El cambio
de forma puede ser del orden material (por ejemplo, fabricación de golosinas) o
inmaterial (elaboración de contenidos periodísticos) y, también, el cambio de
ubicación puede ser del orden físico (distribución de las golosinas por camión)
o virtual (envío de las noticias por correo electrónico). En cualquier
sistema de producción entran recursos o entradas provenientes del exterior del sistema [inputs]. En una analogía termodinámica, la
función de producir se puede definir como tomar energía del medio externo, transformarla y devolverla al mismo. También involucra una adaptación a dicho
medio, que si resulta exitosa redunda en una mejora de las entradas; es decir,
si las salidas coinciden con las necesidades del medio y son bien recibidas, es
posible establecer un círculo virtuoso.
Definir la
finalidad de lo que produce una empresa productora es el punto de arranque para
ver con claridad lo que hace, y así separar lo que es y lo que no es parte de
su negocio. La separación tradicional
entre bienes y servicios es insuficiente para definir la finalidad de la
producción. En todo caso, es más
apropiado discriminar los productos+servicios entre tangibles o no (virtuales),
almacenables o no, perecederos o no, peligrosos o no, etc. Por ejemplo, en términos de la distancia que
separa los lugares en donde se produce y se consume, algunos
productos+servicios se pueden producir en puntos muy distantes al de uso o
consumo (una planta industrial de calzado deportivo o de televisores se puede
ubicar a miles de kilómetros de los consumidores); en cambio, la producción de
otros requiere la presencia de los usuarios en el lugar donde se produce (así
funciona una peluquería o un club deportivo).
También, en términos del tiempo que separa los momentos cuando se
produce y se consume, algunos productos+ servicios se pueden producir mucho
antes del uso o consumo (electrodomésticos, juguetes); en cambio, la producción
de otros requiere de la simultaneidad de los usuarios en el momento cuando se
produce (una conversación telefónica, un viaje en taxi).
Se llaman factores de la
producción a todos los agentes, elementos y/o principios que necesita un
sistema de producción para funcionar y lograr su propósito, y se suelen agrupan
como: A) mano+mente de obra, que brinda el trabajo humano, físico y mental,
tanto operativo como directivo, para hacer funcionar el sistema; B) materias primas a transformar,
junto con insumos (que se utilizan pero no se incorporan a lo producido) y
partes (que se incorporan a lo producido sin modificación alguna); C) máquinas y equipamiento necesarios
para transformar las materias primas, y/o trasladar los productos+servicios al
lugar de entrega, incluyendo edificios, instalaciones, herramientas,
dispositivos y aparatos; y D) métodos de
acción y estándares necesarios para hacer funcionar el sistema. El factor humano es siempre un participante
necesario como hacedor, autor o ejecutor.
La tecnología es información y conocimiento, y generalmente está
incluida en todos los mencionados factores; por ejemplo, puede ser parte de las
habilidades de la mano+mente de obra o del diseño de las máquinas y el
equipamiento.
¿Qué es el mercado de usuarios o consumidores? ¿Quiénes son los clientes del sistema de
producción? ¿Cómo es posible
identificarlos? ¿Qué esperan ellos del
sistema en cuestión? ¿Cómo utilizan los
clientes lo producido por el sistema?
¿Qué consecuencias tiene para los clientes recibir un producto+servicio
distinto al esperado? Toda actividad tiene clientes, en su sentido amplio. Así, el médico
tiene clientes (pacientes que quieren curarse); el gobierno tiene clientes
(ciudadanos que pagan impuestos y esperan seguridad, justicia, educación,
atención de la salud, etc.). En los sistemas de producción, se denominan clientes a quienes consumen y/o usan los
productos+servicios. Por lo general, los clientes se comportan
como otros sistemas que reciben lo producido de los sistemas previos, directa o
indirectamente. Son los que siguen
en la cadena de producción y servicio, y en cuya satisfacción hay que pensar
cuando se hace un producto. Pueden estar dentro de la estructura de
la organización y se denominan clientes
internos, o fuera de ésta y se llaman clientes
externos, o de las dos maneras. El
producto+ servicio intermedio o semielaborado debe satisfacer a los clientes
internos, para no afectar al producto+servicio terminado o mercadería que llega
a los clientes externos.
¿Qué es el mercado de recursos o proveedores? ¿Quiénes son los proveedores del sistema de
producción? ¿Recibe el sistema a los recursos en el mejor
formato? Así como los sistemas de
producción proveen productos+servicios a sus clientes, estos sistemas -a su
vez- tienen proveedores de recursos,
que también pueden ser internos o externos.
Además, puede haber varios proveedores del mismo recurso.
Se colige que para optimizar los sistemas de producción es
necesario incluir clientes y proveedores, tanto internos como
externos; es decir, toda la cadena de producción y servicio. Ver la Figura 1.b. El consultor mexicano
Mauricio Rodríguez Martínez, co-autor del libro "El Nuevo Sistema de
Gestión para las PYMEs", ha señalado al respecto: "Si en una empresa jugamos el doble papel de clientes internos
severos y de proveedores humildes de los clientes externos, entonces podemos
encontrar fácilmente mejores formas de hacer las cosas." Como
proveedores es menester ubicarse con humildad para captar las necesidades de
sus clientes y producir de acuerdo con ellas.
Idealmente, los proveedores deben entregar productos+servicios que cumplan los requisitos de sus clientes. Y los clientes deben especificar sus
requisitos o expectativas; es decir, aquello que requieren o esperan del
producto+servicio para satisfacer sus necesidades y deseos. Pero, no siempre tales expectativas resultan
explícitas, y es menester detectar cuáles
son. Es necesario preguntar a los clientes cuáles características
y propiedades del producto+servicio son importantes para ellos, y volcarlo
a una especificación estándar, formal y explícitamente. Dichos estándares definen los resultados que se deben obtener para satisfacer a los
clientes, o metas del desempeño de los sistemas de producción.
1.2.
Comportamiento de los Sistemas
Sociotécnicos.
El pensamiento sistémico adquiere sentido en tanto se puedan apreciar
componentes, patrones o vínculos propios, que permitan inferir el comportamiento de los sistemas
sociotécnicos. La variedad y
extensión de sistemas y subsistemas imaginables puede ciertamente exceder la
posibilidad de apreciar tales comportamientos, y por ello importa focalizar la
atención en cuestiones atinentes a los sistemas empresariales y de producción:
la causalidad de los resultados; la modelización de cada realidad y la
evaluación del desempeño.
1.2.1.
Principio de Causalidad.
En física, el principio de causalidad
describe la relación entre causas y efectos, y es fundamental en las ciencias. En el pasado, se asumía que todos los eventos
eran causados por otros anteriores y que dicha causalidad podía expresarse en
términos de leyes de la naturaleza, con
carácter determinístico. Esto es, aplicando
determinados estímulos o ejerciendo ciertas acciones sobre un sistema, se puede
inferir cuál o cuáles serán sus reacciones.
Así, al girar la llave de encendido del motor de un automóvil, u oprimir
el botón de un piso en un ascensor, es esperable que tales sistemas técnicos se
comporten de acuerdo con un patrón diseñado que se repetirá una y otra vez.
Modernamente, en la mecánica cuántica, se ha
demostrado que no es posible predeterminar con certeza un único estado final a
partir de condiciones iniciales, sino sólo con carácter probabilístico. No obstante ello, se sigue entendiendo, a los
fines prácticos, que el principio de
causalidad es aún un concepto válido, y que muchos fenómenos de dichos
sistemas pueden ser ordenados en causas y efectos para anticipar sus resultados.
Las conductas de los
seres humanos presentan singularidades que requieren analizarse antes de
extrapolar el principio de causalidad a los sistemas sociales. A escala de
laboratorio, y en condiciones acotadas, el fisiólogo ruso Iván Petróvich Pávlov
formuló a fines del siglo XIX la ley del reflejo
condicionado, observando que la salivación de los perros que
utilizaba en sus experimentos se producía ante la presencia de comida. Con
ello, pareció confirmarse un comportamiento determinístico. En realidad, las
condiciones que rodean cualquier acontecimiento conductual de los seres
humanos, presentan una complejidad mucho mayor, siendo hoy desconocidas muchas
causas y sus efectos sobre el comportamiento.
Los seres
humanos podemos reaccionar de variadas maneras ante estímulos aparentemente
similares, aún cuando el resto de las condiciones intervinientes permanezcan
iguales. De manera que el principio de
causalidad presenta limitaciones en el estudio de sistemas sociales, siendo de
utilidad para estudiar fenómenos del pasado (por ejemplo, investigar un
accidente), y no tanto para predecir resultados futuros (por ejemplo,
aceptación de un nuevo modelo).
¿Cómo considerar al conjunto
de causas que devienen en la obtención de un cierto resultado? En cualquier sistema es fundamental conocer las causas de
sus resultados. La omisión de
cualquiera de ellas puede originar resultados inesperados. En la Figura 1.c se representan los
antecedentes y los consecuentes de un sistema por medio del diagrama de causa y efecto. También se lo conoce
como diagrama espina de pescado [fish bone diagram], por su forma de esqueleto
de pescado que suele tomar; o diagrama de Ishikawa, en reconocimiento al
profesor japonés que lo utilizó
por primera vez, para resumir las opiniones de un grupo de discípulos sobre las
posibles causas de un problema.
Es una
técnica gráfica, simple y efectiva, para visualizar los múltiples factores que pueden interactuar en fenómenos complejos. Permite analizar de manera sistémica
las relaciones entre un determinado efecto (resultado)
y los diversos factores causales que lo pueden originar. Por lo habitual, el efecto se coloca en el
lado derecho del diagrama, y las causas se ubican a la izquierda. Además, estas últimas
se agrupan en categorías de similar significación y se representan por sendas flechas oblicuas
(que inciden lateralmente, de izquierda a derecha, sobre una flecha horizontal
que da idea de la integración de los factores en juego). Con ello, antes que significar compartimentos
o jerarquías, se trata de integrar y ver complementariedad, donde cada factor
coexiste e interactúa con los otros. Sobre cada una de tales líneas de
confluencia, se trazan otras menores representativas de las causas de segundo
orden o secundarias. A continuación, es
posible representar las causas terciarias, y así sucesivamente. Por ejemplo, las
causas secundarias derivadas de la materia prima suelen comprender su tipo y
especificación; el mantenimiento es generalmente una causa secundaria de las
máquinas y equipos; y la competencia suele serlo de quienes aportan la
mano+mente de obra. A su vez, las causas
terciarias derivadas de la competencia suelen ser las habilidades y conocimientos.
Se entiende por modelización a
la creación y uso de representaciones o modelos. En general, se recurre a la modelización de
cosas y fenómenos, físicos y/o virtuales, para facilitar el pensamiento
sistémico. Los modelos pueden ofrecer
representaciones en pequeña escala y/o simplificada de realidades más
complejas, siendo útiles como ayuda para pensar, experimentar, explicar,
predecir y/o controlar sistemas de todo tipo.
Así, resulta posible experimentar con los modelos y no con las
respectivas realidades, lo que permite estudiar el funcionamiento de éstas siempre que aquellos las representen
adecuadamente. Los modelos pueden ser de
distintos tipos según la función, la naturaleza, la relación temporal o el
grado de certeza involucrado. Ver la Figura
1.d. Por ejemplo, cuando se adopta como
modelo una planilla de cálculo para preparar un cuadro de origen y aplicación
de fondos, se trata de un modelo predictivo, abstracto, estático y
determinístico.
En general, se utilizan modelos de simulación
o de optimización; los primeros tienen sentido probabilístico y los
segundos carácter normativo. Cada día se
utilizan más modelos matemáticos, no sólo en las ciencias físicas y naturales
sino también en las ciencias sociales y del comportamiento. Esto ha dado lugar, precisamente, a la teoría
de la medición que trata del uso de los números en las cosas y los
fenómenos.
Mediante la modelización de un sistema es posible
representar la interrelación entre los componentes del mismo, suponiendo que
forman parte de fenómenos regidos por el principio de causa y efecto, mediante
ecuaciones matemáticas que relacionan variables entre sí, como representaciones
válidas del funcionamiento conjunto. Por
ejemplo, si se pretendiera utilizarlo como modelo de optimización, la solución consistiría
en definir las magnitudes numéricas de las variables que optimicen el desempeño deseado (de manera que todas las
relaciones sean satisfechas respetando las
restricciones). En cualquier caso, para
modelizar un sistema es necesario definirlo claramente. Algunas veces, las salidas pueden ser los
productos+servicios que egresan diariamente de una fábrica y, otras veces, las
mercaderías que llegan a los comercios minoristas desde los almacenes
regionales de la empresa.
Comúnmente, en un modelo sistémico se definen: A)
propósitos, con sus políticas, objetivos y metas; B) recursos; C) productos+servicios;
D) componentes y reglas de interacción (explícitas o implícitas); E) parámetros
(constantes inherentes al sistema); F) variables internas y externas (controlables
y no controlables); y G) medio externo o entorno (condiciones o restricciones).
1.2.3. Medidas de Evaluación.
¿Cómo se están
haciendo las cosas? ¿Por qué medir? Medir es asignar números a las cosas de acuerdo con ciertas reglas. Contar con medidas de evaluación de los resultados
de los sistemas, constituye un
requerimiento básico para saber cómo se están haciendo las cosas. La medición de los resultados permite
expresar, comparativamente, cantidades o magnitudes de los mismos. Es decir,
atribuir números a las características y las propiedades de los objetos, en
virtud de leyes que gobiernan esas características y propiedades.
En general, existen diferentes tipos:
· Mediciones fundamentales. Son aquellas mediciones para las cuales es
posible establecer alguna unidad natural específica, con representación
extensiva. El instrumento para medir
posee la misma cualidad que aquello que se quiere medir. El Sistema Internacional de Unidades, define
sólo siete: metro (longitud), kilogramo (peso), segundo (tiempo), Ampere
(electricidad), grado Kelvin (temperatura), candela (luz), y mol (peso
atómico).
· Mediciones derivadas. Se obtienen empíricamente, de forma
indirecta, mediante relaciones entre medidas fundamentales. Por ejemplo, la densidad se mide en kg/m3, la velocidad en m/seg, la luminancia en
cd/m2.
· Mediciones vinculadas. Según una
determinada teoría o criterio, que vincula cosas observables con conceptos,
cuando no es posible medir directamente estos últimos. Así, se miden variables relacionadas que sólo
tienen significado operacional. Por
ejemplo, grado de aprendizaje mediante los errores cometidos, marcha de una
empresa mediante sus ganancias, calidad de vida de los habitantes de un país
mediante su producto bruto interno, etc.
Sólo la medición de
los resultados de los sistemas de producción a lo largo del tiempo ofrece una
representación concreta de la marcha de los mismos, o sea, de su desempeño
[performance]. Ayuda a la exploración o monitoreo
de la evolución del desempeño de éstos sistemas en el sentido con que se llevan
a cabo, detectando las desviaciones respecto a lo esperado e identificando las
oportunidades de mejora. Tal medición es
igualmente útil para proyectar tendencias; permite realizar análisis de sensibilidad (toda vez que
una misma causa puede provocar efectos o resultados distintos en sistemas
distintos) y análisis comparativo (entre
distintos sistemas en un determinado momento, o bien de un sistema consigo mismo,
a lo largo del tiempo). Los proverbios
"Lo que se mide es lo que se hace" y "Sólo es posible mejorar lo
que antes se mide" parecen muy ciertos.
Con frecuencia, se suele tropezar con dificultades inherentes a la
medición (falta de datos, alteraciones debidas al instrumento utilizado, etc.),
pero es necesario remarcar que sin datos fidedignos y confiables es imposible
considerar tema alguno con suficiente seriedad.
¿Qué medir? ¿Quiénes
deberían hacerlo? En general, es
conveniente elegir varias medidas de evaluación
de los resultados del sistema, complementarias y distintas, con la finalidad de
contrapesarlas. Así, se puede propiciar
la optimización de un aspecto sin relegar otros (por ejemplo, aumentar la
cantidad producida manteniendo la calidad).
Las medidas de evaluación de los resultados se deben seleccionar con el
propósito de lograr una mayor comprensión de los sistemas y, también, para
alcanzar el desempeño deseado de los mismos.
Además, deben ser de fácil obtención, y factibles de ser representadas
gráficamente. Quien
sea que realice la medición, debe recibir entrenamiento para medir, y
eventualmente, interpretar las medidas de evaluación.
¿Cuáles son las medidas y/o los indicadores de
evaluación aconsejados? Siempre que se
consideran sistemas o modelos de sistemas con alguna medida de valor, es
necesario incluir los criterios de
evaluación o valoración de sus resultados.
Errores en su elección pueden llevar a conclusiones equivocadas. Contar con medidas o indicadores de
evaluación apropiados implica la posibilidad de conocer mejor los sistemas,
realizar comparaciones y tener mayor información para planear, generar
alternativas y analizar oportunidades de mejora. Se pueden expresar como magnitudes
absolutas o en términos relativos, en forma de porcentajes. Con frecuencia, se prefieren las medidas en
forma de índices [ratios] o indicadores de evaluación, relacionando las
magnitudes de dos o más variables.
Para evaluar el comportamiento de
los sistemas de producción, son usuales las siguientes medidas:
· Eficacia
[efficacy] = resultado
real ÷ resultado planeado.
Concepto que discierne el grado hasta el
cual un resultado realmente logrado satisface la meta planeada o resultado
esperado. Relaciona resultados
(salidas) entre sí, tales como: venta real relativa a venta planeada;
cantidad de producción realizada relativa a cantidad de producción
planeada. Por ejemplo, si un sistema de
preparación de comidas frescas se ha planeado para preparar mil quinientos
platos diariamente, el sistema es 100% eficaz cuando puede alcanzar esa meta, y
sería sólo 50% eficaz si puede producir setecientos cincuenta platos por día.
· Eficiencia
[efficiency] = recurso planeado
÷ recurso real.
Concepto que posibilita evaluar el grado
de aprovechamiento del recurso planeado relativo al realmente utilizado. Relaciona
recursos (entradas) entre sí, tales como: horas-máquina planeadas relativas
a horas-máquina reales utilizadas; Kwatt-h planeados relativos a Kwatt-h utilizados.
Por ejemplo, si acorde con cierta fórmula de diseño, se requiere un kilogramo
de reactivo químico para producir una unidad, pero en realidad el sistema en
cuestión debe usar dos kilogramos para producir esa unidad, se dice que es el
50% eficiente.
Cuando el recurso es algún material utilizado, el
indicador del rendimiento, rinde o
aprovechamiento [yield], suele coincidir con la eficiencia del mismo, si se lo
relaciona con el consumo planeado (por ejemplo, superficie planeada versus real
de chapa metálica para troquelar una determinada cantidad de discos).
· Efectividad
[effectiveness] = eficacia
´ eficiencia.
El aumento de la efectividad de determinado sistema,
en cierto tiempo, implica la mejora de su desempeño real en ese tiempo, ya sea
a través de los recursos utilizados, o de los resultados logrados, o de ambos a la vez. Relaciona recursos con resultados
provenientes de la utilización de aquellos. Un sistema es altamente efectivo cuando produce a lo
largo del tiempo resultados que exceden consistentemente a los esperados
empleando menos recursos que los planeados.
También podría ser eficaz aunque no eficiente, si alcanzara
la meta planeada utilizando más recursos que los planeados; o bien, podría ser
eficiente aunque no eficaz, si utilizara adecuadamente los recursos sin lograr
los resultados planeados. Así, por
ejemplo, un vuelo comercial que arribe a destino en horario de la forma
esperada, pero transportando un tercio del pasaje planeado, sería eficaz pero
no eficiente. En cambio, sería eficiente
pero no eficaz, un taller en el cual la mano de obra, la maquinaria y los materiales
se utilicen según lo planeado, pero no cumpla con la cantidad o fecha de
entrega esperada.
La Figura 1.e muestra la relación
entre los criterios
de evaluación expuestos. También se suele utilizar alguna medida de flexibilidad
[flexibility] del sistema, tal como: porcentaje de pedidos
especiales atendidos, tiempo promedio para procesar un pedido
especial, velocidad de cambio de
producto o atención de clientes con requerimientos fuera de lo común. Este concepto juzga con qué rapidez y facilidad se puede adaptar determinado sistema
para producir distintos flujos y/o
entregar diversos productos+servicios. Es decir, determina su competencia de reconfiguración dinámica (golpe de timón) para aprovechar las oportunidades externas
emergentes.
Cálculo de Medidas de
Evaluación.
Se conocen los siguientes datos de fabricación de un objeto:
Planeado Real
Producción Mano+mente Producción
Mano+mente
de obra de obra
-unidades- -horas hombre- -unidades- -horas
hombre-
Máquina 1 1.000 8
1.200 10
Máquina 2 2.000
10
1.800 8
¿Cuál es la eficacia de la Máquina 1?
Eficacia
= resultado real ÷
resultado planeado
=
1.200 unidades ÷ 1.000 unidades
=
1,2 (o sea, en base porcentual, 120%)
¿Cuál es la eficiencia de la mano+mente de
obra utilizada en la Máquina 2?
Eficiencia =
recurso planeado ÷ recurso real
=
10 horas hombre ÷ 8 horas hombre
=
1,25 (o sea, en base porcentual, 125 %)
¿Cuál es la efectividad de la Máquina 1?
Efectividad =
eficacia ´ eficiencia
=
{1.200 unidades ÷ 1.000 unidades} ´ {8 horas hombre ÷ 10 horas hombre}
=
0,96 (o sea, en base porcentual, 96%)
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